FE DE ETARRAS - MUDBOUND

Plataformas digitales como “Netflix”, “HBO” y “Amazon” han supuesto un gran cambio en el modo de entender la televisión y el cine. Ya no es preciso esperar a un día ni a una hora determinados para disfrutar de las series favoritas, como tampoco lo es sufrir los molestos cortes publicitarios que interrumpen la emisión. De igual manera, antes de su estreno en las salas de proyección, algunas películas se hallan a disposición de los clientes que contratan estos servicios. Todavía está por ver cómo afectará esta nueva modalidad de exhibición a la industria del audiovisual, si bien resulta innegable que Internet ha transformado la práctica totalidad de los negocios y de las vías de comunicación entre personas. Así pues, no hace falta ser demasiado perspicaz para darse cuenta de que futuro, tecnología y red están abocados a ir de la mano. 

Por lo que se refiere al Séptimo Arte, acaba de llegar a las carteleras la cinta “Fe de etarras”, de Borja Cobeaga, un habitual de la comedia española tanto en su formato televisivo (“Muchachada Nui”, “Vaya semanita”) como en el de la gran pantalla (“Pagafantas”, “No controles). En cuanto a la cinta estadounidense “Mudbound”, dirigida por Dee Rees, por el momento no se prevé su estreno en España, aunque ya está cosechando diversos reconocimientos por parte de las grandes Asociaciones de Críticos norteamericanos y obteniendo nominaciones y premios para su realizadora y su elenco de actores. El hecho es que ambos largometrajes pueden visionarse en “Netflix” desde hace semanas, lo cual refleja una quiebra de la relación temporal existente hasta ahora entre los estrenos en sala y los pases por televisión, tableta, móvil u otros dispositivos. 

“Fe de etarras” pretende ofrecer una visión humorística del terrorismo etarra. No cabe duda de que todo artista posee el legítimo derecho de recurrir a cualquier estilo para construir sus trabajos. Pero, dicho esto, también tiene que ser consciente de los peligros que acarrea parodiar determinados temas especialmente sensibles. No obstante, en esta ocasión, el principal inconveniente no radica en la polémica suscitada por tratar desde el humor un fenómeno susceptible de levantar ampollas. Podría considerarse incluso un signo de inteligencia y brillantez. El mayor demérito se encuentra en el guion y en su permanente intento, desesperado y desesperante, por estirar la gracia de unos tópicos que no dan más que para un “sketch” de pocos minutos, nunca para cubrir un metraje de hora y media. El tono jocoso del etarra cabreado por los triunfos de la Selección Española de Fútbol o la caricatura del discurso reivindicativo del terrorista dan para lo que dan y, desde luego, no bastan para conformar una historia completa, convirtiendo en cansino y ridículo lo que debería ser entretenido y divertido. 

El caso de “Mudbound”, prueba la capacidad que conlleva el género del drama para arrancar de grandes actores unas actuaciones merecedoras de todo elogio. Es de justicia descubrirse ante el buen hacer de unos intérpretes implicados, efectivos y creíbles. Hasta la fecha, la eterna problemática del racismo en los Estados Unidos ha inspirado cientos de títulos, algunos con un nivel sobresaliente. Sin embargo, reconociendo los innegables méritos de este último trabajo, considero que termina por contagiar al espectador de una pegajosa sensación anodina, sólo sacudida por la rabia angustiosa que provocan algunas de sus secuencias más duras. En otras palabras, la desazón impregna cualquier mente con un mínimo de moral que asista a la exposición de tanto dolor y desesperanza. ¿Cuánta tristeza puede soportarse? ¿Cuánto abatimiento? ¿Cuánta injusticia? “Mudbound” suministra una sobredosis de desconsuelo y abusos que termina por saturar de tragedia al público más desprevenido. 

Lo que es evidente es que esta alternativa ha venido para quedarse. No será la primera vez que nos sorprendamos por tener al alcance de la mano, en sentido literal y de forma legal, un film meses antes de su estreno o de su participación en festivales. Estas fechas serán desde ahora inciertas e interpretables. Ya nada volverá a ser como antes.

Trailer de "Fe de etarras"

Trailer de "Mudbound"