La discriminación racial en Estados Unidos es una de esas heridas que, en mi opinión, no han terminado de cicatrizar, pese a que el paso del tiempo parezca indicar lo contrario. Ya decía Albert Einstein que "es más fácil desintegrar un átomo que un prejuicio", por lo que esos fantasmas del pasado, en parte, del presente y, seguramente y por desgracia, del futuro (similares a los que imaginó Charles Dickens hace más de ciento cincuenta años) se presentan con cierta frecuencia en la cultura norteamericana en general y en su cine en particular. Mientras veía determinadas escenas de “El mayordomo”, no podía evitar que pasaran por mi mente otras de “Arde Mississippi” o de la más reciente “Criadas y señoras”, dos modelos muy diferentes de abordar esta sensible y peliaguda cuestión. En este caso, el prisma utilizado también difiere. Si la primera cinta era un thriller policiaco y la segunda una comedia melodramática, en “El mayordomo” predomina el drama biográfico.
Traslada a la pantalla la historia real de Cecil Gaines, un hombre de color que sirvió como mayordomo jefe de la Casa Blanca a ocho Presidentes de los Estados Unidos, desde 1952 a 1986, por lo que pudo apreciar la evolución social, política y racial norteamericana tanto desde la residencia presidencial como desde los barrios más modestos que frecuentaba como ciudadano. Se trata, por tanto, de un interesante largometraje, tanto por lo que cuenta como por cómo lo cuenta y, sobre todo, por el magnífico ejercicio interpretativo de su extenso elenco de actores. Los grandes aficionados al Séptimo Arte disfrutarán de un casting de lujo integrado por caras conocidas, en su mayor parte a cargo de pequeños papeles, pero logrando en conjunto un resultado brillante.
En el apartado masculino, tanto Forest Whitaker como Terrence Howard y Cuba Gooding Jr. poseen estatuillas o nominaciones y demuestran una habilidad frente a la cámara digna de mención. A ellos se unen otros muchos, formando una mezcla de lo más singular, desde el músico Lenny Kravitz a actores más asociados al género de comedia, como Robin Williams o John Cusack.
En el femenino, la estrella televisiva Oprah Winfrey, hasta la fecha sin apenas intervenciones en la pantalla grande, da vida a su personaje de forma memorable, al frente de otro ramillete de figuras destacadas como Vanessa Redgrave, Jane Fonda o la cantante Mariah Carey. No es aventurado afirmar que varios de ellos figurarán en las listas de nominados a los próximos Oscars y Globos de Oro.
No obstante, cabe señalar que el ritmo del film languidece a ratos y que el intento de que cada personaje disfrute de su particular momento de lucimiento provoca que la narración no siempre resulte coherente y se enrede en un estilo dramático que, en ocasiones, le impide brillar como debiera.
Por lo que respecta a su realizador, Lee Daniels, se dio a conocer con “Precious”, otra tragedia centrada en la marginalidad. En ella trasladaba una visión de las miserias humanas por medio de la recreación de un universo angustioso y opresor que llegaba a contagiar al espectador, de tal manera que, aun reconociendo sus méritos, era imposible abandonar la sala de proyección con un buen sabor de boca, tan llena como estaba de la amargura transmitida por Daniels. Ahora, el público tendrá más opciones de disfrutar con este visionado pero será igualmente inevitable que perciba parte de ese denso universo de pesadumbre en el que se mueve su director. En cualquier caso, tras varias semanas viendo malas películas, por fin he contemplado cine de calidad. Y lo echaba de menos.
Trailer en castellano:
Trailer en versión original:
Datos del film:
Película: El mayordomo.
Título original: The butler.
Dirección: Lee Daniels.
País: USA. Año: 2013. Género: Drama.
Interpretación: Forest Whitaker (Cecil Gaines), Oprah Winfrey, David Oyelowo, Alex Pettyfer, Alan Rickman, Jane Fonda, John Cusack, Oprah Winfrey, Cuba Gooding Jr., Terrence Howard, Lenny Kravitz, Robin Williams (presidente Dwight D. Eisenhower), Liev Schreiber (Lyndon B. Johnson).
Guion: Lee Daniels y Danny Strong; basado en un artículo de Wil Haygood.
Producción: Ed Cathell III y Pam Williams.