viernes, 21 de febrero de 2025

CAPITAN AMERICA: BRAVE NEW WORLD (Captain America: Brave New World)




Rodar una película sobre el Capitán América sin el Capitán América resultaba arriesgado, aunque algún precedente similar ya había existido. Así, en la saga del agente Jason Bourne se estrenó un largometraje con la ausencia de Matt Damon y su célebre personaje (“El legado de Bourne”, en cuyo reparto figuraban Jeremy Renner, Rachel Weisz y Edward Norton). Sea como fuere, no deja de sonar forzado continuar un serial sin contar con su máximo protagonista, pero la tentación de seguir exprimiendo una fórmula altamente rentable se torna muy elevada, por más que, en ocasiones, haya empezado a mostrar señales de debilidad y agotamiento. 
Entre 2011 y 2016 llegó a las pantallas una trilogía sobre este popular héroe de cómic (“Capitán América: el primer vengador”, “Capitán América y el soldado de invierno” y “Capitán América: Civil War”), tres entretenidas producciones que alcanzaron un nivel aceptable. De zanjarse las propuestas en aquel momento, se hubiera podido hablar de un gran éxito de taquilla, valorándose además sus aspectos cinematográficos. Sin embargo, se lanzó una franquicia paralela (“Los Vengadores”), que incluía “Los Vengadores”, “Vengadores: La era de Ultrón”, “Vengadores: Infinity War” y “Vengadores: Endgame” y que, por lo menos a mí, me provocó una notable saturación y un regusto final bastante cansino. 
Como en cualquier otro ámbito, conviene saber cuándo parar y cuándo llevar a cabo un replanteamiento, una reflexión que ha pasado de largo para la Marvel. En todo caso, la recaudación siempre manda para esta productora experta en superproyectos en los que reincidir, repetir e insistir sobre las mismas ideas y con idénticas herramientas.  ¿Hubo acaso necesidad, tras los tres filmes iniciales de Tobey Maguire como “Spiderman”, de recaer de nuevo, esta vez con Andrew Garfield? ¿O no fue acaso surrealista (siendo benévolo) recurrir a tres actores en una misma cinta para dar vida al hombre araña? Convendría que alguien se atreviera por fin a manifestar, parafraseando al astronauta Jack Swigert durante el accidentado viaje del Apolo 13, “Marvel, tenemos un problema”. Y el problema, obviamente, no estriba en el presupuesto, a la vista de los ingresos estratosféricos, sino en la carencia de arte y creatividad.   
Uno de los amigos del Capitán América, “Falcon”, antiguo militar norteamericano, miembro de “Los Vengadores” y heredero del escudo que antes portaba Steve Rogers, conoce al recién elegido Presidente de los Estados Unidos. El ex soldado tendrá que dar la talla ante una nueva amenaza que expande sus ocultos tentáculos a nivel internacional, llegando hasta las más altas esferas de la política. 
Obviamente, disponer de ciento ochenta millones de dólares facilita la consecución de importantes avances técnicos y de cierto grado de entretenimiento, pese a que el guion se vuelva farragoso y poco elaborado, dando lugar a una trama quebradiza. A mi juicio, no se equipara en ningún modo a su trío de antecesoras, ni tampoco explica la razón por la que se ha filmado bajo el halo de un personaje inexistente.  
Captain America: Brave New World repite como “Falcon”, a quien ha interpretado en numerosas ocasiones, tanto en la pantalla grande como en la pequeña. Al margen de sus trabajos para la factoría Marvel, ha participado en algunos títulos relevantes como “Million Dollar Baby”, de Clint Eastwood o “En tierra hostil”, de Kathryn Bigelow, hace más de tres lustros. Parece que ahora ha centrado su carrera en este personaje y, con independencia de entender tal decisión, considero que ese encasillamiento limita su progresión profesional.  El famosísimo Harrison Ford encarna al principal mandatario estadounidense, como hiciera en “Air Force One”, y la sólida carrera de este mito del Séptimo Arte no se verá enturbiada por su caracterización como líder político de turbio pasado. 
Les acompañan Danny Ramirez (“Top Gun: Maverick”), Shira Haas (“María Magdalena”) y Tim Blake Nelson (“La delgada línea roja”, “Minority Report”)




lunes, 17 de febrero de 2025

PREMIOS BAFTA 2025 (Bafta Awards 2025)




La lista de los ganadores de los Premios BAFTA de la Academia del Cine Británico en este años 2025 es la siguiente: 

MEJOR PELÍCULA: Conclave

MEJOR DIRECCIÓN: The Brutalist, Brady Corbet

MEJOR ACTRIZ: Mikey Madison, Anora

MEJOR ACTOR: Adrien Brody, The Brutalist

MEJOR ACTRIZ SECUNDARIA: Zoe Saldaña, Emilia Pérez

MEJOR ACTOR SECUNDARIO: Kieran Culkin, A Real Pain

MEJOR GUION ORIGINAL: A Real Pain

MEJOR GUION ADAPTADO: Conclave

MEJOR PELÍCULA BRITÁNICA: Conclave

MEJOR PELÍCULA DE HABLA NO INGLESA: Emilia Pérez

MEJOR MÚSICA: The Brutalist

MEJOR FOTOGRAFÍA: The Brutalist

MEJOR MONTAJE: Conclave

MEJOR DISEÑO DE PRODUCCIÓN: Wicked

MEJOR DISEÑO DE VESTUARIO: Wicked

MEJOR MAQUILLAJE Y PELUQUERÍA: The Substance

MEJOR SONIDO: Dune: Part Two

MEJORES EFECTOS VISUALES: Dune: Part Two

MEJOR CASTING: Anora

MEJOR PELÍCULA ANIMADA: Wallace and Gromit: Vengeance Most Fowl

MEJOR DOCUMENTAL: Super/Man: The Christopher Reeve Story

MEJOR PELÍCULA FAMILIAR: Wallace and Gromit: Vengeance Most Fowl

MEJOR DEBUT BRITÁNICO: Kneecap

MEJOR CORTOMETRAJE BRITÁNICO: Rock, Paper, Scissors

MEJOR CORTOMETRAJE BRITÁNICO DE ANIMACIÓN: Wander to Wonder 

BAFTA EE RISING STAR: David Jonsson

BAFTA FELLOWSHIP: Warwick Davis

viernes, 14 de febrero de 2025

FUERA DE LA LEY (Greedy People)



El título original de “Fuera de la ley” (“Greedy People”, “gente codiciosa”), creo que se ajusta mejor a esta pretendida comedia con toques de suspense. Si bien cuenta con algunas escenas graciosas que invitan a la diversión, se trata de una propuesta escasamente elaborada, plena de situaciones forzadas y de giros pintorescos. Y, pese a que estos recursos suelen ser habituales en las películas que utilizan el humor como hilo conductor, a la larga la endeblez del guion y el exceso de disparates empujan al largometraje a un nivel medio: no destaca por nada en particular y logra el aprobado gracias a destellos graciosos que le permiten cumplir la función de mero pasatiempo. 

Durante su visionado no puede evitar acordarme de “Un plan sencillo”, film de Sam Raimi rodado en 1998, en el que abordaba temáticas similares, aunque con acierto y calidad muy superiores. Como regla general, el dinero rápido acarrea serios problemas y coloca a los individuos ante encrucijadas inimaginables, convirtiéndose en una fuente inagotable de creación de personajes interesantes, tramas intensas y entretenimiento de calidad. En este caso concreto, apreciándose el esfuerzo por alcanzar tales objetivos e, incluso, lográndolos parcialmente en diversos tramos del metraje, predomina una acusada tendencia hacia la risa fácil que, por lo que a mí respecta, rara vez funciona.  

Dos policías que desempeñan su labor en un tranquilo pueblo se ven envueltos de pronto en un insólito y rocambolesco crimen que les conduce a una enorme cantidad de dinero en efectivo. Ante la posibilidad de convertirse en millonarios, encadenan una serie de decisiones que degeneran en un cúmulo de complicaciones, al tiempo que el número de personas interesadas en el botín también se incrementa.  

Dirige la cinta Potsy Ponciroli, cuyo anterior trabajo (“Old Henry”) fue considerado por la National Board of Review una de las diez mejores muestras de cine independiente de 2021, participando asimismo en la Mostra de Venecia del citado año. Western de acción dramática, nada tiene que ver con este “Fuera de la ley”, que presenta un estilo claramente desenfadado.  

Agradará a buen seguro al tipo de público que se interesa y engancha con sucesos criminales que se desarrollan en la denominada América profunda, ya popularizados en títulos como la excelente “Fargo”. Obviamente, no adquiere la categoría de la obra de hermanos Coen, cuyo guion e interpretaciones la supera con claridad, pero el repertorio de conductas torpes, inauditas y chuscas de ese interior geográfico estadounidense dan lugar a una clase de humor lo suficientemente entretenido como para pasar casi dos horas delante de una pantalla. 

Figuran en el reparto numerosas caras conocidas. Himesh Patel y Joseph Gordon-Levitt interpretan a los dos agentes. El primero ha intervenido en comedias como “No mires arriba” o “Yesterday” y, cambiando de registro, en el casting de “Tenet”. El segundo debutó profesionalmente en 1992 con “Beethoven: Uno más de la familia”, después se puso a las órdenes de Robert Redford en “El río de la vida” y, más tarde, triunfó en “(500) días juntos”, “Lincoln”, “Origen” y “El caballero oscuro: La leyenda renace”, ambas últimas bajo la batuta de Christopher Nolan.

En el apartado femenino se encuentran Lily James (“Baby Driver”, “La sociedad literaria y el pastel de patata”) y Uzo Aduba (“American Pastoral”). A cargo de un papel secundario, les acompaña el protagonista de la mencionada “Old Henry”, el siempre singular Tim Blake Nelson (“La delgada línea roja”, “Syriana”, “Minority Report”).