viernes, 31 de mayo de 2024

FURIOSA: DE LA SAGA MAD MAX (Furiosa: A Mad Max Saga)



Fue en 1979, hace ya cuarenta y cinco años, cuando el cineasta australiano George Miller estrenó “Mad Max: Salvajes de autopista”, con un jovencísimo y todavía desconocido Mel Gibson en el reparto. La repercusión de aquella propuesta dio inicio a una saga que se completó con “Mad Max 2, el guerrero de la carretera” (1981) y “Mad Max, más allá de la cúpula del trueno” (1985). Confieso que nunca ha sido una trilogía de mi agrado pero, sea como fuere, desde mediados de los ochenta parecía cerrada y amortizada. Su director, después de estrenar “Las brujas de Eastwick” y “El aceite de la vida”, se centró en producciones protagonizadas por animales (“Babe, el cerdito en la ciudad”, “Happy Feet” -que le reportó un Oscar de Hollywood- y “Happy Feet 2”). Sin embargo, en 2015 retomó aquel primer éxito y rodó “Mad Max: Furia en la carretera”. Ahora, casi una década después, presenta “Furiosa: De la saga Mad Max”, anunciando además una sexta entrega de este serial de aventuras. Miller, que se convertirá en octogenario dentro de unos meses, mantiene sin duda su espíritu joven y juguetón.

Puedo entender los motivos por los que gustan estas últimas producciones. Estéticamente resultan llamativas, visualmente poseen fuerza y ritmo, y narrativamente desprenden una extraña combinación de fatalidad y rebeldía. Algunas secuencias se encuentran muy bien trabajadas técnicamente y logran arrastrar al público por esa senda de furia y descontento que, a buen seguro, llevan consigo y desean liberar en la sala de proyección. También presentan un perfil de videojuego que engancha a las nuevas generaciones. Por lo tanto, se augura otro notable éxito de taquilla.  

No obstante, a mí ese engatusamiento visual no me dura la totalidad del metraje (en mi opinión, excesivo) y empiezo a detectar importantes vacíos de guion al cabo del primer cuarto de la historia. Cada vez percibo más reiteraciones respecto a las anteriores aventuras y termino distanciándome de la nueva oferta. Conforme se acerca el final, recupero un nuevo brío que me anima a mirar con mayor interés, pero sin entusiasmo. Y, como me sucede en otras tantas ocasiones, acuso un estiramiento artificial en la duración de la cinta y en el número de títulos que componen la saga, máxime cuando se ha anunciado su continuación en poco tiempo.

En un mundo postapocalíptico donde todo ha perdido su valor, los pocos supervivientes se guían por la ley del más fuerte. Sin aprecio por la vida, lo único que despierta un brutal interés es la gasolina, sinónimo de poder y objetivo de mafias y bandas armadas especialmente violentas. Ante estas adversas condiciones surge, despiadada y salvaje, la joven Furiosa, que se verá inmersa en una lucha entre dos tiranos.

Ese empeño de deslumbrar a base de imágenes recargadas, coloridas y extravagantes termina por resultar redundante y excesivamente estridente. Un fenómeno similar sucede con el ansia de rodar acrobacias y movimientos imposibles que, más que entretener, agota. Aun así, reconozco ingenio y arrojo a la hora de trasladar a la gran pantalla una idea que, contada con palabras, sonaría ridícula pero que, traducida a imágenes, posee magnetismo si quiera a ratos.

Anya Taylor-Joy y Chris Hemsworth asumen los papeles estelares. Ella saltó a la fama gracias a las series televisivas “Gambito de dama” y “Peaky Blinders”, participando después en largometrajes como “Última noche en el Soho”, “El menú” o “Amsterdam”. Su rostro diferente y su habilidad interpretativa le convierten en una presencia especial delante de la cámara. Él lleva construyendo su carrera paralelamente a la del personaje de Marvel “Thor”, que alterna con filmes de acción como “Tyler Rake” o ”12 valientes”. Ambos cumplen con su labor, aunque cabe reconocer que Taylor-Joy sobresale.

Completan el elenco Tom Burke (“Living”, “Mank”), Lachy Hulme (“Matrix Revolutions”), Charlee Fraser (“Cualquiera menos tú), Elsa Pataky (“Fast & Furious”) y Nathan Jones (“Troya”, “Conan el bárbaro” de 2011).



domingo, 26 de mayo de 2024

PALMARÉS DEL FESTIVAL DE CINE DE CANNES 2023

Sección Oficial

  • Palma de Oro: 'Anora'
  • Gran Premio del Jurado: 'All We Imagine as Light'
  • Premio del Jurado: 'Emilia Perez'
  • Premio Especial del Jurado: 'The Seed of the Sacred Fig'
  • Premio del Jurado Ecuménico: 'The Seed of the Sacred Fig'
  • Mejor dirección: Miguel Gomes por 'Grand Tour'
  • Mejor actriz: Adriana Paz, Zoe Saldana, Karla Sofía Gascón y Selena Gomez por 'Emilia Perez'
  • Mejor actor: Jesse Plemons por 'Kinds of Kindness'
  • Mejor guion: Coralie Fargeat, por 'The Substante'
  • FIPRESCI: 'The Seed of the Sacred Fig'

Un Certain Regard

  • Mejor Película: 'Black Dog'
  • Cámara de Oro (Mejor Ópera Prima): 'Armand'
  • Premio del Jurado: 'L'histoire de Souleymane'
  • Mención especial del jurado: 'Norah'
  • Mejor dirección: Roberto Minervini, por 'The Damned' / Rungano Nyoni, por 'On Becoming a Guinea Fowl'
  • Mejor actriz: Anasuya Sengupta, por 'The Shameless'
  • Mejor actor: Abou Sangare, por 'L'histoire de Souleymane'

viernes, 24 de mayo de 2024

LO QUE SUCEDE DESPUÉS (What Happens Later)



Durante los años ochenta y noventa, Meg Ryan contó con un destacado protagonismo y relevancia en el mundo del cine. Debutó en 1981 con la película “Ricas y famosas”, dirigida por el gran George Cukor. Participó asimismo en importantes éxitos de taquilla, como “Top Gun”. Incluso se encumbró como reina de la comedia romántica gracias a títulos tan icónicos como “Cuando Harry encontró a Sally” o “Algo para recordar”. Sin embargo, su buena racha cambió con la llegada del nuevo siglo, entrando en un bucle de desafortunado declive. Por lo que respecta a David Duchovny, alcanzó la fama mundial merced a la popular serie televisiva “Expediente X”, que derivó en obra de culto con legiones de seguidores. Interpretó el personaje de Fox Mulder en ambos formato de pantalla, triunfando por todo lo alto a nivel mundial. No obstante, nunca llegó a destacar fuera de la piel del mítico agente del FBI, a quien dio vida durante más de una década. Se encasilló de tal manera en el papel que el resto de sus trabajos pasaron prácticamente desapercibidos.

Ahora, ejerciendo ella como productora, guionista, actriz y directora, y él como actor, regresan con una propuesta que pretende ser otra comedia romántica, pero que desde el inicio evidencia que no servirá para revivir tiempos pasados que, para ellos, fueron sin duda mejores. Las comparaciones, inevitables y odiosas, impiden que este nuevo proyecto ni siquiera se acerque  mínimamente a las cintas clásicas en las que se inspira o desea homenajear, convirtiéndose a la postre en una apuesta desangelada.

“Lo que sucede después” avanza a base de chispazos puntuales, algún diálogo más o menos logrado y ciertos momentos con mayor sentido, pero desconectados dentro de demasiado metraje,  insulso y, en ocasiones, hasta ridículo. Cuanto tiene que ver con el sentimentalismo requiere siempre de una conexión (a menudo, inexplicable) entre obra y espectador. Pues bien, aquí dicha conexión no existió conmigo y me aventuro a afirmar que tampoco con la inmensa mayoría del público. Ciertamente, la frontera entre lo romántico y lo cursi, entre lo entrañable y lo ñoño, resulta bastante fina y, en este concreto ejemplo, se traspasa demasiadas veces.

Después de una larga etapa, dos antiguos amantes se reencuentran por primera vez en un aeropuerto desde que se separaron. Atrapados debido a las inclemencias meteorológicas, de entrada sólo desean llegar a sus destinos y continuar con sus vidas. Sin embargo, durante el transcurso de la noche, comienzan poco a poco a sentir de nuevo cierta atracción mutua y se plantean revisar el pasado y lo que podría haber sido su relación.

No faltan nombres de actores y actrices que desempeñan notablemente su faceta artística detrás de la cámara, pero no es el caso de Meg Ryan. Sus carencias como realizadora resultan evidentes, manifestando una desidia en la forma de contar la historia que conduce a mirar el reloj más de una vez a lo largo de la proyección, ansiando su finalización. Tal vez sirva, como mucho, para querer revisionar antiguos largometrajes de la misma temática. Esa sana nostalgia por volver a ver lo que nos conmovió, gustó o entretuvo constituye, probablemente, el mayor valor de “Lo que sucede después”.

Por ello, ese mensaje final de decadencia afecta tanto a Meg Ryan como a David Duchovny, de hecho los únicos intérpretes del film. Solos los dos ante el peligro, el propio peligro les atrapa. Quién sabe si esta idea hubiera dado lugar a un buen cortometraje. Desde luego, como largo moderado (apenas supera la hora y media de duración), todavía diversos tramos resultan prescindibles. Cabe resaltar que, al menos, el bajo coste de tres millones de dólares juega a su favor, una cifra bastante exigua para una producción norteamericana y, por tanto, fácilmente recuperable. Aun así, y pese a todo lo escrito anteriormente, la pareja posee suficiente gancho entre la audiencia como para evitar un desastre económico.



viernes, 17 de mayo de 2024

HASTA EL FIN DEL MUNDO (The Dead Don't Hurt)



Que el western se alza como una especialidad norteamericana muy enraizada en su cultura e idiosincrasia resulta innegable, sin que ello signifique que los demás espectadores a nivel mundial no puedan también disfrutar con esta singularidad estadounidense. Aunque configurar una lista de sus mejores títulos constituye una temeridad, sí es cierto que el citado género escasea desde hace décadas, sobre todo en comparación con el porcentaje de películas de esta temática rodadas en los tramos iniciales de la historia del Séptimo Arte. Ahora se estrena de cuando en cuando alguna muestra de lo que se dio en llamar “la Conquista del Oeste”. “Hasta el fin del mundo” (en el original, “The Dead Don't Hurt”) nos retrotrae precisamente a aquella época de vaqueros, ranchos en mitad de la nada y revólveres al cinto, si bien no se trata de un modelo de aventuras, ni tampoco un entretenimiento sencillo.

Posee la curiosa habilidad (o, para otros, el detestable defecto) de pretender compaginar la visión de la crueldad humana con la hermosura y la ternura, acompasando todo a un ritmo más bien lento, en ocasiones hasta demasiado pausado, que a la larga se evidencia necesario para la cocción óptima de esta sabrosa degustación. Reconozco que el resultado final me ha gustado por su valentía, honestidad e, incluso, belleza, por mucho que la maldad humana y su naturaleza violenta se empeñen en rehogarla con sabores desagradables. Un drama, pues, correctamente filmado, estéticamente cuidado, a cargo de interesantes personajes y con una trama trabajada.

Algunas escenas recuerdan a cintas ya visionadas, como “Cold Mountain”, y determinadas partes del guion presentan ciertas similitudes. Aun así, nos hallamos ante una obra de autor con suficientes méritos propios para ser valorada por sí misma, una propuesta ecléctica formalmente clásica, pero moderna en el fondo. En cualquier caso, ni cualquier estómago podrá digerirla, ni responderá a expectativas de acción ni enfrentamientos armados entre indios y cowboys.

Una joven mujer de espíritu libre e independiente comienza una relación con un inmigrante al que conoce en la ciudad de San Francisco. Abandonan el bullicio de la creciente urbe y se instalan en una hacienda a las afueras de un pueblo. Allí inician su vida en común, pero la fatalidad del destino les separa al desencadenarse la Guerra Civil. De repente, ella se queda sola en un paraje inhóspito controlado por una familia violenta y corrupta. Los deseos de tranquilidad de la pareja darán paso a la crueldad y los sentimientos de venganza.

Viggo Mortensen produce, dirige, firma el guion y compone la banda sonora, lo que da la medida de su grado de implicación personal con la historia. Debutó como director en 2020 con el film “Falling”, que le reportó un premio en el Festival de Cine de San Sebastián. Inició su faceta interpretativa en la pantalla grande interviniendo junto a Harrison Ford en “Único testigo” (1985) y se ha consolidado gracias a sus destacadas actuaciones en “Captain Fantastic”, “Green Book”, “Promesas del Este”, “Un método peligroso” o “Una historia de violencia”, aunque su mayor éxito comercial se produjo gracias a la saga de “El señor de los anillos”, siendo considerado un buen intérprete que mantiene una interesante carrera profesional. Con “Hasta el fin del mundo” continúa apuntalando su meritoria y relevante trayectoria.

Le da la réplica la actriz Vicky Krieps, quien ya destacó sobremanera en la magnética y exasperante “El hilo invisible”, acompañando a Daniel Day-Lewis. Su fuerza expresiva encandila a la cámara y la eleva en cada plano. Lleva a cabo una sensacional interpretación. Completan el reparto Solly McLeod (de la serie televisiva “La casa del dragón”) y Garret Dillahunt (“12 años de esclavitud”, “No es país para viejos”).



viernes, 10 de mayo de 2024

MISIÓN HOSTIL (Land of Bad)



Por desgracia para “Misión hostil”, existen numerosas películas de acción de temática bélica y las hay de diversos estilos y calidades. Ello supone que, frente a una enésima propuesta, se requiera un mínimo de originalidad o, en su caso, un guion y unos personajes sólidos y bien trabajados. No basta con filmar secuencias arriesgadas y concatenar planos repletos de tiros y luchas cuerpo a cuerpo. Las misiones llevadas a cabo por grupos militares en selvas tropicales cuentan ya con sus largometrajes más que memorables. Por lo tanto, sólo cabe limitarse a reiterar –perdiendo así capacidad de sorprender-, o tratar de innovar. Como alternativa, o se dispone de una trama a cargo de diálogos notable y papeles sugestivos, o la mayor parte del público perderá el interés a mitad de la proyección. En mi caso, prácticamente cada escena me recordaba a otra similar vista en otra cinta más lograda, por lo que mi visionado transcurrió añorando títulos antiguos y desconectándome por completo de las imágenes en pantalla.

Se sitúa detrás de la cámara William Eubank, responsable de trabajos como “Underwater” (2020), con Kristen Stewart y Vincent Cassel, o “Paranormal Activity: Allegados” (2021), protagonizada por Emily Bader. En esta “Misión hostil” reúne, en principio, todos los complementos requeridos para un entretenimiento de dos horas. Sin embargo, termina por convertirse en una producción más cansina que intensa.

Un piloto de drones de la Fuerza Aérea apoya un operativo especial en el sur de Filipinas. Tras detectar algo sospechoso en la jungla durante un reconocimiento aéreo, sus planes comienzan a trastocarse. Los soldados que se despliegan por tierra son atacados y capturados. A partir de ese momento, se inicia un plan de rescate más peligroso y complejo de lo previsto inicialmente.

A mi juicio, los principales méritos de esta propuesta radican en su ajustado presupuesto (apenas alcanza los veinte millones de dólares), su pronto olvido y su capacidad de retrotraer al público a filmes clásicos de la misma temática. Por lo demás, el exceso de tiros, músculos y luchas no se compensa en modo alguno con otros alicientes, ni siquiera con un casting donde figura algún nombre ilustre y varios rostros famosos llamados a animar la compra de entradas.

Encabeza el elenco de estrellas Russell Crowe, un actor con cuatro años profesionalmente prodigiosos (entre 1997 y 2001) en los que acumuló sus sobresalientes actuaciones en “L.A. Confidential”, de Curtis Hanson, “The Insider (El dilema)”, de Michael Mann, “Gladiator”, de Ridley Scott, y “Una mente maravillosa”, de Ron Howard. Pese a la dificultad de mantener tal nivel en sucesivas etapas, todavía dejó algunas perlas como “El tren de las 3:10”, de James Mangold, y “Red de mentiras” y “American Gangster”, de nuevo a las órdenes de Ridley Scott. A partir de ahí, ha iniciado un declive del que no consigue recuperarse y, desde luego, “Misión hostil” tampoco le ayudará en ese objetivo.

Junto a él intervienen dos de los tres hermanos Hemsworth (Liam y Luke), ambos a la sombra de Chris. El primero ha actuado en la saga de “Los juegos del hambre”, “Independence Day: Contraataque”, “Asalto al furgón blindado” y “Poker Face”, bajo la dirección del propio Russell Crowe, y que tampoco modificó su senda descendente. Luke, por su parte, ha participado recientemente en “El peor equipo del mundo”, de Taika Waititi. Les acompañan Ricky Whittle (“En tierra de Jane Austen”) y Lincoln Lewis (“After Earth”).



jueves, 9 de mayo de 2024

FESTIVAL DE CINE DE CANNES 2024



Del 14 al 25 de mayo se celebra uno de los festivales de cine más importante del mundo. Coppola, Lanthimos, Cronenberg y muchos más cineastas competirán por ganar la Palma de Oro entregada por el Jurado que preside Greta Gerwig.

Película de Inauguración
-LE DEUXIÈME ACTE (THE SECOND ACT) – Quentin DUPIEUX

Competición Oficial
-THE APPRENTICE – Ali ABBASI
-MOTEL DESTINO – Karim AÏNOUZ
-BIRD – Andrea ARNOLD
-EMILIA PEREZ – Jacques AUDIARD
-ANORA – Sean BAKER
-MEGALOPOLIS – Francis Ford COPPOLA
-THE SHROUDS – David CRONENBERG
-THE SUBSTANCE – Coralie FARGEAT
-GRAND TOUR – Miguel GOMES
-MARCELLO MIO – Christophe HONORÉ
-FENG LIU YI DAI (CAUGHT BY THE TIDES) – JIA Zhang-Ke
-ALL WE IMAGINE AS LIGHT – Payal KAPADIA
-KINDS OF KINDNESS – Yórgos LÁNTHIMOS
-L’AMOUR OUF – Gilles LELLOUCHE
-DIAMANT BRUT (WILD DIAMOND) – Agathe RIEDINGER (ópera prima)
-OH CANADA – Paul SCHRADER
-LIMONOV – THE BALLAD – Kirill SEREBRENNIKOV
-PARTHENOPE – Paolo SORRENTINO
-PIGEN MED NÅLEN (THE GIRL WITH THE NEEDLE) – Magnus VON HORN

Un Certain Regard
-NORAH – Tawfik ALZAIDI
-THE SHAMELESS – Konstantin BOJANOV
-LE ROYAUME – Julien COLONNA (ópera prima)
-VINGT DIEUX! – Louise COURVOISIER (ópera prima)
-LE PROCÈS DU CHIEN (WHO LET THE DOG BITE?) – Lætitia DOSCH (ópera prima)
-GOU ZHEN (BLACK DOG) – GUAN Hu
-THE VILLAGE NEXT TO PARADISE – Mo HARAWE (ópera prima)
-SEPTEMBER SAYS – Ariane LABED (ópera prima)
-L’HISTOIRE DE SOULEYMANE – Boris LOJKINE
-LES DAMNÉS (THE DAMNED) – Roberto MINERVINI
-ON BECOMING A GUINEA FOWL – Rungano NYONI
-BOKU NO OHISAMA (MY SUNSHINE) – Hiroshi OKUYAMA
-SANTOSH – Sandhya SURI
-VIET AND NAM – TRUONG Minh Quý
-ARMAND – Halfdan ULLMANN TØNDEL (First film)

Cannes Premiere
-MISÉRICORDE – Alain GUIRAUDIE
-C’EST PAS MOI – Leos CARAX
-EVERYBODY LOVES TOUDA – Nabil AYOUCH
-EN FANFARE (THE MATCHING BANG) – Emmanuel COURCOL
-RENDEZ-VOUS AVEC POL POT – Rithy PANH
-LE ROMAN DE JIM – Arnaud LARRIEU, Jean-Marie LARRIEU

Sección Oficial Fuera de Competición
-FURIOSA: UNE SAGA MAD MAX (FURIOSA: A MAD MAX SAGA) – George MILLER
-HORIZON, AN AMERICAN SAGA – Kevin COSTNER
-SHE’S GOT NO NAME – CHAN Peter Ho-Sun
-RUMOURS – Evan JOHNSON, Galen JOHNSON, Guy MADDIN

Proyecciones de Medianoche
-TWILIGHT OF THE WARRIOR WALLED IN – Soi CHEANG
-I, THE EXECUTIONER – Seung Wan RYOO
-THE SURFER – Lorcan FINNEGAN
-LES FEMMES AU BALCON (THE BALCONETTES) – Noémie MERLANT

Proyecciones Especiales
-LA BELLE DE GAZA – Yolande ZAUBERMAN
-APPRENDRE –Claire SIMON
-L’INVASION (THE INVASION) – Sergei LOZNITSA
-ERNEST COLE, PHOTOGRAPHE (ERNEST COLE, LOST AND FOUND) – Raoul PECK
-LE FIL – Daniel AUTEUIL

 

viernes, 3 de mayo de 2024

SIEMPRE NOS QUEDARÁ MAÑANA (C'è ancora domani)



Los David de Donatello son los galardones cinematográficos más prestigiosos otorgados por la Academia del Cine Italiano y, probablemente, también los más tardíos en entregarse. El próximo 3 de mayo, el mismo día en que se publicará esta crítica, las estatuillas reconocerán las producciones del año 2023, de modo que no podré reflejar el resultado. No obstante, la película que parte con mayor número de candidaturas, nada menos que diecinueve, es “Siempre nos quedará mañana”, que ya cuenta con uno asegurado y previamente anunciado: el denominado “David dello spettatore”, al título más visto por el público en las salas de proyección.

Aunque en su última edición, la candidata por Italia al Oscar al mejor film de habla no inglesa fue “Yo, capitán” (que recibió la nominación, pero no el ansiado reconocimiento), “Siempre nos quedará mañana” cosechó un rotundo éxito dentro de sus fronteras, con una recaudación superior a los cuarenta millones de euros, convirtiéndose en la cinta más taquillera de la época posterior al covid, por encima de fenómenos mundiales como "Oppenheimer" o "Barbie".

¿Pero qué tiene esta obra? Sobre todo, una extraordinaria capacidad para conmover y una certera habilidad para tratar un tema tan desagradable como el de los malos tratos con una visión que termina resultando bonita y esperanzadora. La propuesta engancha al espectador porque le compele directamente y le ofrece un ramillete de secuencias donde, finalmente, son la emoción, el optimismo y la reafirmación femenina los que destacan. Tal vez el guion suscite algunos reparos y quizá la narración se altere para alcanzar los propósitos de la directora pero, en cualquier caso, no cabe duda de que desprende sensibilidad. Si después de contemplar una historia tan triste, prevalecen en la memoria los momentos hermosos, alegres y alentadores, la labor de maquillaje autoimpuesta ha surtido su efecto.

En la Roma de la década de los cuarenta, una mujer, madre y esposa, se limita a ejecutar tales roles conforme a las reglas impuestas en la época. No parece contar, en principio, con más opciones, toda vez que las penurias post bélicas y la compañía de un marido tosco y embrutecido no le animan a explorar otros caminos, pese a los malos tratos continuos que padece. El hombre no pierde ocasión de proclamar su dominio y superioridad dentro de la casa, y tan sólo respeta a su propio padre. Ante semejante tesitura, la única ilusión de ella se centra en el casamiento de una de sus hijas, enlace que también la novia justifica en el deseo de escapar de su familia. Cuando el panorama parece condenado a perpetuarse, un repentino giro abrirá la puerta a que la protagonista se replantee su existencia.

Paola Cortellesi asume la doble faceta de directora e intérprete principal. Muy conocida en su país de origen, con este trabajo ha dado el salto a la esfera internacional. Realiza una buena labor en las dos actividades que desempeña y consigue firmar un trabajo que, a mi juicio, trascenderá y se convertirá en un clásico del cine italiano. No parece sencillo aunar delicadeza y brutalidad, hermosura y barbarie, tristeza y esperanza. Y en esta capacidad estriba su mayor logro, al margen de cuestionamientos de técnica o estilo. Quién sabe si, con menos tacto, el proyecto hubiera sido un fracaso. Pero el hecho cierto es que se alza como un éxito llamado a contribuir a la lucha contra la violencia de género de un modo más eficaz que otras propuestas realistas y desgarradoras.

Completan el reparto el actor Valerio Mastandrea, cuyo personaje peca de excesiva caricaturización y que en 2009 participó en el musical “Nine”, a las órdenes de Rob Marshall, Romana Maggiora Vergano, Emanuela Fanelli y Giorgio Colangeli.